Título en español: Hombre en llamas
Escrita por Brian Helgeland
Dirigida por Tony Scott
Protagonizada por Denzel Washington, Dakota Fanning, Marc Anthony, Radha Mitchell, Christopher Walken, Rachel Ticotin, Mickey Rourke y Giancarlo Giannini
Duración: 140 minutos

"En Latinoamérica hay un secuestro cada 60 minutos. El 70% de las víctimas no sobrevive".

Con esta afirmación comienza Man on fire, el nuevo film de Tony Scott (Top gun, Enemy of the state) sobre la relación que nace entre un amargado guardaespaldas y la niña a quien debe cuidar.

John Creasy (Washington) es un ex-militar con un pasado oscuro, que ha preferido alejarse de ese mundo y dedicarse a la bebida. Un día recibe un llamado de un antiguo conocido, Rayburn (Walken), quien lo recomienda como guardaespaldas a una adinerada familia Mexicana. El esposo (Anthony) es un joven empresario casado con una Norteamericana (Mitchell) y con una hermosa y precoz niña llamada Pita (Fanning). Después de una breve entrevista, Creasy es contratado.

Como es de esperarse, al endurecido hombre no le agrada para nada tener que cuidar a una pequeña niña, y menos aún una tan precoz y extrovertiva como esta, pero a medida que van pasando los días y que ambos pasan más tiempo juntos, la relación entre los dos comienza a mejorar y ambos se convierten en buenos amigos, incluso Creasy la ayuda a entrenar para una competencia de natación en su escuela.

Un día, luego de una clase de piano, Pita es secuestrada por un grupo armado al que Creasy enfrenta cayendo herido, no sin antes matar a varios de los secuestradores, entre los que se encuentran un par de policías corruptos.

Los secuestradores llaman para pedir el rescate, $10 millones, que deberá ser entregado por el padre de la niña siguiendo estrictas instrucciones. Pero cuando se va a realizar la entrega algo sale mal y hay un nuevo enfrentamiento entre policías y secuestradores del que uno de ellos resulta muerto.

Una vez que se logra recuperar un poco de sus heridas, Creasy logra escapar del hospital con la ayuda de Rayburn y de Mariana García (Ticotin) una periodista del diario La Reforma, comienza a planear su venganza contra los maleantes que se llevaron a la pequeña niña. A partir de aquí, el guardaespaldas se torna más violento e inescrupuloso que los propios criminales y cada ataque que hace en contra de ellos es peor que el anterior. Como le diría Rayburn al jefe de policía (Giannini), "el arte de Creasy es la muerte, y ahora va a pintar su obra maestra".

A medida que Creasy va encontrando pistas e interrogando a los involucrados, la verdad sobre el secuestro se va develando y se descubre una compleja trama que el guardaespaldas deberá desenrredar para hallar al verdadero culpable.

Man on fire es más un thriller que un film de acción, pero esto no evita que uno de los mejores elementos de esta película sean las escenas en las que el personaje de Washington cobra venganza sobre los criminales. Realmente, los métodos utilizados para interrogar a los secuestradores son bastante violentos, pero bastante originales a la vez. Igualmente la escena del secuestro, en la que el director utiliza varios trucos para subir la intensidad de la situación, realizando rápidos cortes y ediciones, utilizando cámara lenta y varios puntos de vista, y particularmente un truco bastante innovador que constó en utilizar una cámara antigua, al estilo de las usadas para el cine mudo, que fue adaptada para filmar con película actual, y que genera tomas muy interesantes en las que la velocidad de grabación no es constante (posiblemente estoy explicando esto de manera que no se entienda mucho...tendrás que ver la película).

Tanto el guión como la actuación son realmente buenos y cumplen su cometido. La primera mitad de la película se dedica a crear la relación entre Creasy y Pita, y tanto Washington como Fanning nos logran convencer de que este hombre llegaría hasta los extremos que llega para vengar a esa pequeña niña. El resto de los personajes tiene una función más complementaria que otra cosa, por lo que es una verdadera lástima que ni Walken ni Giannini tuvieran más que hacer con sus roles.

Al final, Man on fire termina siendo un buen thriller, con innovadoras escenas de acción y fuertes actuaciones. Vale la pena verla.