Get on the bus - 1996
Título en español: ??????
Escrita por Reggie Rock Bythewood
Dirigida por Spike Lee
Protagonizada por Charles S. Dutton, Ossie Davis, Thomas Jefferson Byrd, Andre Braugher, Richard Belzer, Gabriel Casseus, Roger Guenveur Smith, Isaiah Washington, Harry J. Lennix, Hill Harper, Bernie Mac, Wendell Pierce y Albert Hall
Duración: 137 minutos
En octubre de 1996 se realizó en Washington D.C. la Marcha de un Millón de Hombres (The Million Man March), una protesta pacífica compuesta (en un 99.9%) de hombres negros norteamericanos, cuya finalidad era demostrar la solidaridad y la fuerza en la unión de la raza negra de ese país. Esta reunión estuvo liderada, ni más ni menos, que por Louis Farrakhan, la cabeza de la Nación de Islam, la controvertida organización musulmana que, dependiendo del día, es o no racista y/o extremista. Esta marcha creó en su momento mucha controversia, ya que la gente no entendía claramente cuáles eran las intenciones que sus organizadores tenían; el gobierno lo veía como una protesta peligrosa, que buscaba 'revolver' todo el tema de los derechos civiles; las mujeres se pensaron que se trataba de algo sexista, ya que ellas estuvieron excluídas de la invitación (algo no tan descabellado, si se observa la manera en la que los musulmanes, y en especial agrupaciones como la Nación del Islam, tratan al sexo femenino de una manera diferente (y hasta inferior); y por supuesto, los blancos veían con temor una congregación tan grande de hombres de otra raza.
En conmemoración de ese encuentro, el director Spike Lee decidió hacer un pequeño film que narra, no la marcha en sí, sino la travesía realizada por un grupo de hombres Afroamericanos que sale desde Los Angeles con la intención de participar en el encuentro. Este film es uno de los de menor presupuesto que ha realizado este aclamado (y criticado) director, y para obtener los fondos necesarios (ningún estudio quiso apoyarlo), se valió de sus contactos y de la intervención de varias personalidades negras, incluyendo a celebridades como Danny Glover, Wesley Snipes, Will Smith, Robert Guillaume, Charles Smith (el jugador de basketball) y Johnnie Cochrane (el abogado de O.J. Simpson), quienes donaron entre $100.000 y $200.000, hasta completar los $2.4 millones que fueron necesarios para filmar la película.
Get on the bus no intenta contar la historia de la marcha. De hecho, la película termina con la llegada del grupo a la ciudad de Washington. Más bien se enfoca en la dinámica de la relación que se forma entre los diferentes personajes, al verse estos confrontados los unos con los otros en el restringido espacio del autobus en el que viajan. Lo que le da valor a la película es la diversidad de puntos de vista que se presentan una vez que comienza el viaje -- Lee buscó ofrecer diferentes aspectos de la cultura negra, para demostrar a la audiencia la mezcla de opiniones y de realidades de vida que tienen diferentes sectores de esta raza dentro de un mismo país. La idea era mostrar personalidades que se salieran de los esterotipos, y que supieran mostrar diferentes posiciones ante una verdad común.
Esta concepción es la que le da el valor a la película: el poder descubrir lo que viven (y cómo lo viven) diferentes factores de la comunidad negra Estadounidense.
Para lograr esto, Lee se apoya en un guión que, a pesar de tener una gran falla, resulta bastane completo y cohesionado. Lamentablemente, desde el punto de vista de Lee (el único que está por encima de los otros puntos de vista presentados en el film), no hay ningún personaje que sea realmente malo -- quizás solo uno (el negro Republicano), y solo dura un corto tiempo en la película.
Otro elemento que le da valor a la película, y que permite que el objetivo de Lee se alcance, viene dado por el excelente trabajo de todos los actores involucrados. Para este film se reunió una suerte de 'dream team' del cine Afroamericano (sin los obvios superstrellas, como Denzel, Will y Wesley, por supuesto) y cada uno de los actores (que de seguro reconocerán de otras películas, pero que probablemente no conozcan por sus nombres) realiza una muy buena labor.
Los hombres que realizan el viaje cuentan con una gran diversidad: Gary (Guenveur Smith) es un policía de Los Angeles, mitad negro y mitad blanco, que duda de su 'negritud' (no sé si esta palabra exista, pero es lo que mejor se me ocurrió para expresar 'blackness' en relación a la raza) y que busca ir a la marcha para aclarar las inquietudes de su propia personalidad; Evan (Jefferson Byrd) es un hombre que se encuentra literalmente encadenado a su hijo, Junior (Bonds), por órdenes de la corte, y que está intentando recuperar la confianza que perdió al abandonar a Junior y a su madre; Kyle (Washington) y Randall (Lennix), son dos amantes homosexuales que están a punto de terminar su relación; Flip (Braugher), es un actor a la espera de una respuesta de su agente sobre si consiguió o no el papel de reparto en la nueva película de Denzel Washington; Xavier (Harper), es un estudiante de cine que quiere crear un documental con la experiencia y que intenta filmar todo lo que sucede en el autobus; Jamal (Casseus), es un criminal reformado, creyente del Islam; y Jeremiah (Davis), es un anciano que representa la voz de la sabiduría (sabiduría que viene de haber cometido muchos errores en el pasado). El grupo lo completan Charles S. Dutton como George, el organizador del viaje, y Richard Belzer, como Rick, el judío que conduce el autobus. Hay otros personajes que no tienen tanta participación, como Mike (Mac) y el mencionado 'negro Republicano', Wendell (Pierce).
Como es de esperarse, el viaje, además de ser largo, presenta una serie de situaciones que se prestan para crear ciertas confrontaciones entre los tripulantes, mismas que permiten al espectador ver los diferentes puntos de vista que cada uno tiene -- temas como el crimen en los barrios negros, la homosexualidad, la imagen negativa que tiene su cultura frente a la cultura blanca, las relaciones familiares, e incluso los motivos propios de cada uno para asistir a la marcha.
Como también es de esperarse, al contarse con tantos personajes es difícil que todos ellos tengan suficiente tiempo para ser desarrollados completamente, lo que es una lástima, pero no evita que el descubrimiento por parte de cada uno de ellos (y por parte del espectador) de sus verdaderas personalidades vayan creciendo a medida que va transcurriendo el viaje.
Al final, Get on the bus termina siendo uno de los films menos 'de protesta' de Spike Lee, y a la vez, el que mayor carga racial tiene sin necesidad de caer en violencia. Se queda un poco corto en comparación con otros de sus trabajos (p.e. Do the right thing, 25th hour, Jungle fever, entre otros), pero sigue siendo una buena película, digna de ver para poder disfrutar de las excelentes actuaciones de todo el elenco, y de aprender un poco más sobre las realidades de la comunidad Afroamericana de Estados Unidos.
Un comentario final, cuando me refiero a los personajes como 'negros', no lo hago de manera despectiva -- de hecho, ellos mismos en el film se tratan de esta forma ('niggers'), y cuando me refiero a la raza como Afroamericana, no la limito a las personas que viven en Estados Unidos, sino en todo el continente Americano (de Norte a Sur).